El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2026, que acaba de remitir el Gobierno al Parlamento, indica que el ingreso mínimo de subsistencia se actualizará hasta los 12.880 euros, con lo que los salarios hasta esa cantidad (que, en principio, será el salario mínimo interprofesional vigente en 2026) estarán exentos de tributación.
El mínimo de subsistencia determina el nivel de ingresos que se garantiza a cada contribuyente una vez aplicados los impuestos. Es decir, siempre que los ingresos después de impuestos sean inferiores al nivel mínimo de subsistencia, el Estado renuncia al impuesto, dejando al contribuyente exento del impuesto sobre la renta.
Por regla general, el valor de referencia se actualiza para garantizar que quienes ganan el salario mínimo nacional estén exentos del impuesto sobre la renta. Esto es lo que ha ocurrido este año, con el aumento del nivel mínimo de subsistencia a 12.180 euros, 14 veces el actual salario mínimo garantizado (870 euros).
En esta ocasión, aún no se ha fijado al 100% el valor del salario mínimo nacional que entrará en vigor el año que viene. Existe, sin embargo, un acuerdo plurianual establecido por la Concertación Social que, si se cumple, garantiza un salario mínimo de 920 euros en 2026.
Sin embargo, en años anteriores, el acuerdo de la Concertación Social fue revisado. Las confederaciones patronales y el Gobierno no han dado ninguna indicación al respecto, pero la ministra de Trabajo, Maria do Rosário Palma Ramalho, aseguró que "ni abrirá ni cerrará la puerta" a una revisión.
Sin embargo, la cantidad que ahora se propone para actualizar el salario mínimo de subsistencia indica que el Gobierno no tiene previsto ir más allá del aumento de 50 euros acordado. De hecho, a lo largo del informe que acompaña al proyecto de presupuestos, el Gobierno asume 920 euros como salario mínimo para 2026.
Al ser preguntado, el Ministro de Hacienda no explicó, sin embargo, si se trata de una cantidad fija o no, remitiendo el debate a la Concertación Social.
Por otro lado, cabe señalar que, en el caso de la Función Pública, está previsto que el salario base aumente hasta los 934,99 euros en 2026. Con el salario mínimo de subsistencia ahora propuesto, los funcionarios seguirán sujetos al impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF).