"Esperamos que, en 2025, con estas dos fases de inversión, podamos alcanzar el 60 por ciento de la energía renovable en la isla de Terceira y que el 44 por ciento provenga de la geotermia, mientras que actualmente la geotermia sólo garantiza el 14,5 por ciento", añadió, en declaraciones a los periodistas, el presidente de EDA y de EDA Renováveis, Nuno Pimentel.

"Si la producción de los pozos se corresponde con lo que esperamos, permitirá la ampliación de esta planta en otros siete megavatios y, por tanto, tener una capacidad instalada en la planta de Pico Alto de unos 10 megavatios, que es lo que, según nuestra experiencia, nos demuestra que es la dimensión económicamente viable para una instalación de esta naturaleza", dijo Nuno Pimentel.

La perforación de los tres nuevos pozos "deberá durar unos seis meses", seguidos de los trabajos de saturación de la planta actual, en una inversión global de 26 millones de euros, hasta 2025.

El presidente de la AED también estima que, a principios de 2022, podrá entrar en funcionamiento un sistema de baterías de almacenamiento y control de energía de la red en la isla de Terceira, que "contribuirá al aumento del incremento de las energías renovables".

Según Nuno Pimentel, la energía geotérmica, existente sólo en las islas de Terceira y São Miguel, donde existe una dimensión para hacer la inversión económicamente viable, es relevante, porque "tiene la capacidad de poder producir de forma continua durante todo el año".

"No depende de las horas, no depende del sol, no depende de la lluvia. Nos da otra garantía en términos de suministro público de electricidad. Es un recurso que debe tener una prioridad relevante en nuestro contexto de transición energética", subrayó.

En la isla de São Miguel se abrieron recientemente seis nuevos pozos, que "entrarán en fase de prueba", con la expectativa de aumentar la energía geotérmica del 42 al 60 por ciento.

El secretario regional de Transportes, Turismo y Energía de las Azores, Mário Mota Borges, destacó la importancia de la energía geotérmica, "no sólo en cuanto a la potencia que se puede disponer, sino sobre todo en la regularidad con la que esta potencia estará disponible".

Según el funcionario, la inversión en la Central Geotérmica de Pico Alto ayudará a la Región a alcanzar el objetivo de penetración del 60% de las energías renovables, reduciendo así la dependencia del exterior y el uso de combustibles fósiles.

"La producción de energía a partir de la geotermia ya está avanzando hacia el nuevo milenio y acercándose a lo que es mantener la calidad de vida con fuentes de energía alternativas, que no tienen una contribución negativa al medio ambiente", subrayó.