"No tengo una cifra rigurosa, pero la inversión global entre Lisboa y Valença, si incluimos la segunda fase de la conexión Oporto-Valença, debe rondar los 7.000 u 8.000 millones de euros", dijo Frederico Francisco a Lusa.

El Subsecretario de Estado de Infraestructuras detalló que cada tramo licitado costará unos 2.000 millones de euros, divididos en Oporto-Oiã, Oiã-Soure, Soure-Carregado, Braga-Valença (incluyendo la conexión entre Oporto y el aeropuerto Francisco Sá Carneiro) y, por último, el aeropuerto - Braga.

Preguntado por el valor y su comparación con el coste estimado para el nuevo aeropuerto de Lisboa, que ronda los 8.000 millones de euros, Frederico Francisco consideró que el dinero será "mejor empleado" en el ferrocarril.

Precisamente para conectar la línea de alta velocidad con el futuro aeropuerto de Lisboa, el acceso a la capital previsto para la tercera fase del proyecto, "dependiendo de dónde se ubique el futuro aeropuerto, podrá entrar por la margen derecha o por la margen izquierda del río Tajo, manteniendo siempre la posibilidad de que los trenes lleguen a Lisboa a través de la Línea Norte", que se cuadruplicará al llegar a Lisboa para recibir los servicios de alta velocidad.

En cuanto a la conexión con el aeropuerto de Oporto, preguntado sobre si no sería suficiente una conexión de la actual línea de Leixões con la infraestructura aeroportuaria, el Secretario de Estado argumentó que, a pesar de los costes, es una "diferencia entre [el tiempo de viaje entre] Campanhã y el aeropuerto tarda 10 minutos o tarda 40".