Este aumento se produjo en un momento en el que las bajas temperaturas provocaron el uso de aparatos de calefacción, lo que se sumó a un mayor número de personas que también regresaron a la oficina para trabajar.

El mayor aumento se registró en el sector de los servicios (7,1%), según el comunicado de la Agencia de la Energía (ADENE), seguido del sector doméstico (4,0%), el transporte (3,5% ) y la industria (1,7%).

"La vuelta al trabajo presencial explica el aumento del consumo en el sector servicios respecto a 2020 y las bajas temperaturas registradas durante el mes de noviembre provocaron un aumento del consumo de electricidad para calefacción en el sector doméstico", subraya ADENE.