Los ingresos por este impuesto aumentaron el año pasado un 6,1% respecto al anterior, lo que, en términos absolutos, supuso 113,6 millones de euros más de recaudación. Aun así, la subida quedó por debajo de las previsiones del Gobierno, que esperaba un aumento del 9%, es decir, unos 161 millones de euros.

El año pasado, la principal contribución a la mejora de los ingresos por el impuesto de actos jurídicos documentados fue el gravamen sobre adquisiciones de inmuebles, que superó los 367 millones de euros. En total fueron más de 53 millones. La segunda mayor contribución al aumento de los ingresos fue la contratación de seguros, con unos 38 millones de euros más para un total de 484,7 millones de euros.