El partido justifica la supresión de estos vuelos por las "distancias relativamente cortas" entre los tres aeropuertos y porque las conexiones ferroviarias tienen "la misma calidad y velocidad". Además de reducir las emisiones globales de gases de efecto invernadero causadas por la aviación.

Esta sugerencia forma parte de un proyecto de resolución que ya ha sido entregado a la Asamblea de la República por el grupo parlamentario del BE para ser discutido y votado por los diputados. Los diputados Fabian Figueiredo, Joana Mortágua, Isabel Pires, José Soeiro y Mariana Mortágua excluyeron de la recomendación los vuelos con origen o destino internacional o en regiones autónomas.

Por ello, los diputados proponen que la Asamblea de la República recomiende al Gobierno "la sustitución progresiva y total, hasta 2026, de las conexiones nacionales entre los aeropuertos de Oporto y Lisboa, y entre los aeropuertos de Lisboa y Faro por conexiones ferroviarias reforzadas, rápidas y a precios asequibles". También piden la "sustitución progresiva y total, de aquí a 2030, de las conexiones nacionales entre los aeropuertos de Oporto y Faro por conexiones ferroviarias reforzadas, rápidas y a precios asequibles".

El BE considera que "el ferrocarril debe ser una prioridad y debe iniciarse una reorganización para sustituir, reducir y finalmente prohibir las conexiones aéreas entre estos tres aeropuertos".